"Nunca he tenido amigos" - Razones y qué hacer al respecto

"Nunca he tenido amigos" - Razones y qué hacer al respecto
Matthew Goodman

Incluimos productos que consideramos útiles para nuestros lectores. Si realiza una compra a través de nuestros enlaces, es posible que ganemos una comisión.

"No consigo hacer amistad con nadie. Lo he intentado, pero nadie parece interesado en pasar tiempo conmigo. Después de tantos fracasos, he perdido la motivación para intentarlo siquiera. ¿Cómo hacen los demás para entablar amistad?".

Si nunca has tenido amigos, puede que sientas que hay algo "malo" en ti, o que estás destinado a ir solo por la vida.

La ansiedad social, la educación, los traumas del pasado, los problemas de confianza o las discapacidades mentales o físicas pueden hacer que te resulte casi imposible hacer amigos.

Sin embargo, puede ser útil recordar que hay muchas otras personas con retos similares a los tuyos que han aprendido a hacer amigos.

Se necesitan muchos pequeños pasos durante un largo periodo de tiempo, pero puedo decirte esto:

Tengo muchos ejemplos de personas con las que he trabajado que han tenido todo en contra y, a pesar de ello, han sido capaces de forjar amistades significativas.

En esta guía, aprenderás las posibles razones por las que nunca has tenido amigos y los pasos prácticos que puedes dar para construir una vida social.

Posibles razones por las que nunca has tenido amigos

1.No tuviste buenos modelos de conducta

Nuestros primeros modelos son nuestros padres o cuidadores.

Lo ideal es que los padres enseñen a sus hijos:

  • Cómo iniciar conversaciones
  • Cómo escuchar y mostrar interés por los demás
  • Qué hacer cuando no se está de acuerdo con otras personas
  • Cómo respetar los turnos y jugar limpio con los demás

Si los tuyos no te enseñaron estas habilidades, probablemente te costó socializar de niño y puede que hoy sigas teniendo los mismos problemas[].

2. Has tenido pocas oportunidades de conocer gente

Por ejemplo:

  • Puede que hayas ido a un colegio muy pequeño o que te hayan educado en casa, lo que significa que no te has mezclado con muchos otros niños.
  • Es posible que te hayas mudado con frecuencia de niño o adolescente, por lo que no tuviste ocasión de conocer muy bien a nadie.
  • Puede que se haya criado en una familia estricta que limitaba sus oportunidades sociales.
  • Puede que hayas elegido una carrera que no te da la oportunidad de conocer a mucha gente o que implica mucho trabajo en solitario.

3. Siempre has sido tímido

La timidez está relacionada con la falta de habilidades sociales. Si eres tímido por naturaleza, puede que te resulte más difícil hacer amigos.[] Las investigaciones demuestran que la timidez es disposicional, lo que significa que aparece a una edad temprana y que muchos niños tímidos se convierten en adolescentes y adultos tímidos.[]

4. Te han acosado

Si de niño sufriste acoso o malos tratos, es más probable que tengas problemas para hacer amigos[],[] Ser tratado mal por otros puede hacer que de adulto seas reacio a confiar en nuevas personas y entablar amistad con ellas.

5. Padece un trastorno del espectro autista (TEA)

Las personas con trastorno del espectro autista (TEA) suelen carecer de las habilidades sociales necesarias para hacer amigos[]. Por ejemplo, pueden tener dificultades para leer las expresiones faciales y no entender cómo respetar los turnos en una conversación.

El TEA es un trastorno del desarrollo, lo que significa que se nace con él. Sin embargo, a algunas personas no se les diagnostica hasta que son adultas. Si crees que puedes tener TEA, haz esta prueba de detección gratuita.

6. Tienes TDAH

Si padeces trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), eres propenso a comportarte de forma impulsiva e hiperactiva. También puedes tener problemas de concentración.

Los síntomas del TDAH pueden dificultar la socialización[] Por ejemplo, puedes tener problemas para concentrarte en lo que dicen los demás durante una conversación.

Si crees que puedes tener TDAH, consulta esta prueba de detección en línea.

7. Padece trastorno de ansiedad social (TAS)

Si padeces TAE, probablemente pases mucho tiempo preocupado por lo que los demás piensen de ti. Puede que te sientas más seguro evitando a la gente en lugar de arriesgarte a pasar vergüenza o a que te rechacen. El TAE puede comenzar en la infancia y, si no se trata, puede convertirse en un trastorno de por vida que te impida hacer amigos[].

8. Tiene un estilo de apego evitativo

Las interacciones que tenemos con nuestros padres cuando somos bebés moldean la forma en que formamos vínculos con otras personas. Si tus padres no satisfacían tus necesidades emocionales, es posible que hayas aprendido que las relaciones son difíciles y que no se puede confiar en otras personas. Como resultado, es posible que hayas desarrollado una actitud de evitación hacia otras personas, aunque a una parte de ti le encantaría tener amigos[].

Puede obtener más información sobre el estilo de apego temeroso-evitativo en Healthline.

9. Eres introvertido

Es un mito que los introvertidos sean asociales o que no quieran hacer amigos. A menudo disfrutan socializando, normalmente en pequeños grupos y en ambientes tranquilos. Pero si eres muy introvertido, relacionarte con otras personas puede ser un reto.

Esto puede deberse a que:

  • Odias las conversaciones triviales, que a menudo son necesarias si quieres conocer a alguien.
  • Te sientes agotado rápidamente en entornos sociales, lo que limita la cantidad de tiempo que puedes pasar con posibles amigos.
  • Sientes que los demás, especialmente los extrovertidos, no te entienden.
  • Necesitas mucho tiempo a solas.

Los que te rodean pueden malinterpretar tu comportamiento. Pueden pensar que prefieres evitar por completo las situaciones sociales. Si sientes que nadie te entiende, es más fácil que te retires por completo.

Cómo hacer amigos cuando nunca los has tenido

Muchas personas se quedan sin amigos en algún momento de su vida. Esto puede ocurrir por muchas razones. Por ejemplo, es habitual que los amigos pierdan el contacto cuando uno de ellos se traslada a otra zona o forma una familia.

Las personas en esta posición necesitan conocer a posibles nuevos amigos. También podrían necesitar mejorar sus habilidades sociales si tienen algunos malos hábitos que ahuyentan a los demás.

Sin embargo, si nunca has tenido amigos, tu situación es diferente. Como no has tenido ninguna oportunidad de practicar cómo conocer a la gente y formar amistades, tendrás que dedicar tiempo a trabajar habilidades básicas, como entablar conversación y pedirle a alguien que salga contigo.

También puedes tener retos adicionales, por ejemplo:

  • Puede que te sientas avergonzado por no haber tenido amigos antes, lo que puede hacerte sentir cohibido. Puede que te preocupe que la gente descubra que no tienes amigos y que piensen que eres raro.
  • A diferencia de muchas personas, no tienes la opción de conocer nuevos amigos a través de los que ya tienes.
  • Puedes ser más vulnerable a los amigos tóxicos, porque no tienes experiencia de primera mano para detectar las señales de alarma.
  • Es posible que tengas traumas muy arraigados o dificultades derivadas de la primera infancia. Por ejemplo, si sufriste acoso escolar grave, tendrás que trabajar para superar tu pasado a la vez que practicas habilidades sociales y conoces a gente nueva.

He aquí algunos pasos prácticos que puedes dar para empezar a hacer amigos:

Ver también: Cómo mostrarse relajado o enérgico en situaciones sociales

1. Practicar las habilidades sociales esenciales

Empieza por aprender las habilidades que necesitas para sentirte más cómodo en situaciones sociales.

Ver también: Cómo afrontar la ansiedad social en el trabajo

Estas habilidades incluyen:

  • Establecer contacto visual
  • Hacer que parezca accesible
  • Conversaciones triviales
  • Mantener una conversación

Consulta nuestra lista de los mejores libros de habilidades sociales para adultos.

No intentes hacer cambios bruscos y drásticos. Ve poco a poco más allá de tu zona de confort y practica estas habilidades en tu vida cotidiana.

Por ejemplo, si te cuesta establecer contacto visual con alguien, ponte como reto establecer contacto visual con una persona nueva cada día, como una cajera o la recepcionista de tu oficina.

2. Encontrar personas afines

Es más fácil entablar amistad con alguien cuando se comparte una afición o una pasión. Desde el principio sabrás que tenéis algo en común, lo que facilita el inicio de una conversación.

Busca reuniones, clases y grupos que giren en torno a tus intereses.

Podrías intentarlo:

  • Meetup o Eventbrite para encontrar grupos de Meetup en tu zona
  • Grupos de Facebook que giran en torno a un tema o afición concretos
  • Reddit
  • Aplicaciones para personas que quieren hacer amigos, como Bumble BFF. Consulta esta lista de aplicaciones y sitios web para hacer amigos.
  • Hazte voluntario. Busca oportunidades en la web VolunteerMatch.

Intenta encontrar un encuentro recurrente en lugar de eventos puntuales. Cuando veas a la misma persona cada semana, tendrás la oportunidad de conocerla.

Consulte nuestra guía sobre cómo conocer a personas afines para obtener más consejos.

3. Cuando congenies con alguien, invítale a salir

Si has mantenido una conversación interesante con alguien y crees que le ha gustado hablar contigo, consigue su número.

Por ejemplo, podrías decir:

"Ha sido muy divertido hablar contigo. Intercambiemos números para seguir en contacto".

Una vez que tengas su número, puedes aprovechar vuestro interés mutuo para hacer un seguimiento más adelante. Por ejemplo, puedes enviarle un enlace a un artículo que crees que le gustaría leer.

Si parece entusiasmado, el siguiente paso es invitarle a pasar un rato con usted. Cuando se está conociendo a alguien, invitarle a una actividad o evento concretos, como un taller o una conferencia, puede resultar menos incómodo que pedirle simplemente que pase un rato con usted.

Consulta esta guía para hacer nuevos amigos.

4. Profundizar en el conocimiento de nuevas amistades

Para que un conocido se convierta en amigo, tienes que aprender más sobre él y, al mismo tiempo, compartir cosas sobre ti.

Para ello:

  • Mantener conversaciones equilibradas en las que te abres a tu amigo y le animas a hacer lo mismo.
  • Revelar sentimientos y opiniones sobre temas cotidianos como el deporte y las películas cuando se conoce a alguien por primera vez, y abrirse a temas más profundos como los miedos y las ambiciones cuando se ha pasado más tiempo juntos.
  • Haga preguntas que fomenten conversaciones más significativas. Lea nuestra guía sobre cómo mantener conversaciones profundas, que incluye ejemplos detallados.
  • Practicar la escucha activa. Presta toda tu atención a la otra persona cuando hable. Si pareces distraído, probablemente se callará.

Consulte este artículo sobre cómo establecer un vínculo afectivo con alguien para obtener más consejos.

A medida que vayas conociendo a alguien, es posible que te pregunte por tus otros amigos. No tienes por qué decirle que nunca has tenido vida social, pero si sale el tema en la conversación, intenta ser sincero. Dale una breve explicación, como "todavía no he conocido a la gente adecuada" o "crecí en una ciudad pequeña, así que nunca he tenido mucha vida social".explicación más adelante.

Si alguien intenta hacerte sentir inferior por no haber tenido nunca amigos, es mejor evitarlo. Un buen amigo no te menospreciará.

5. Manténgase en contacto

Para mantener viva la amistad, es necesario hablar con regularidad[]. Como norma general, intenta contactar con los amigos ocasionales una vez al mes. Ponte en contacto con los amigos íntimos -y con la gente a la que te gustaría conocer mejor- una o dos veces por semana. Lee esta guía sobre cómo mantener el contacto con la gente sin parecer necesitado o molesto.

6. Aprende a evitar a las personas tóxicas

Si tienes muchas ganas de hacer amigos, es posible que sientas la tentación de salir con cualquiera que se interese por ti, lo cual es comprensible, sobre todo si llevas mucho tiempo sintiéndote solo.

Mucha gente se conforma con falsos amigos o enemigos porque piensa que es mejor que no tener amigos. No caigas en esta trampa. Aprende a detectar las señales de las amistades tóxicas y sé selectivo en tu vida social.

7. Busque ayuda profesional si es necesario

La mayoría de las personas pueden aprender a mejorar sus habilidades sociales y a hacer amigos, aunque nunca antes hayan tenido una vida social. Pero es una buena idea consultar a un médico o terapeuta si:

  • Si ha intentado mejorar sus habilidades sociales pero no ha conseguido ningún avance.
  • Si padeces o crees que padeces una enfermedad que te dificulta la socialización, como el trastorno de ansiedad social o el TDAH, puede ser útil trabajar con un médico o terapeuta que te recomiende terapia, medicación o ambas cosas.
  • Tiene antecedentes de trauma o abuso.
  • Si crees que tienes un estilo de apego evitativo que te impide acercarte a otras personas. Éste es un problema que a menudo requiere terapia para solucionarse[].

Si prefiere la terapia en línea, puede probar .

Preguntas frecuentes

¿Es posible ser feliz sin amigos?

Algunas personas se conforman con estar solas; tienen "preferencia por la soledad"[] Sin embargo, esto no significa necesariamente que sean felices sin amigos. Las investigaciones demuestran que las conexiones sociales son clave para nuestro bienestar [] y que interactuar con los demás mejora nuestro estado de ánimo[].

¿Es normal no haber tenido nunca amigos?

Al menos el 9% de los adultos no tiene ningún amigo[]. Los psicólogos aún no saben cuántas personas no han tenido nunca amigos. Sin embargo, algunos niños no hacen amigos[], y parece probable que les siga resultando difícil de adultos.

¿Por qué nunca he tenido amigos?

Si tus padres no te enseñaron las habilidades sociales básicas, es posible que siempre te haya costado hacer amigos. Otras posibles razones son un carácter tímido, la falta de oportunidades para practicar las habilidades sociales, un trastorno del desarrollo, antecedentes de malos tratos o vivir en un lugar sin gente afín.




Matthew Goodman
Matthew Goodman
Jeremy Cruz es un entusiasta de la comunicación y un experto en idiomas dedicado a ayudar a las personas a desarrollar sus habilidades de conversación y aumentar su confianza para comunicarse de manera efectiva con cualquier persona. Con formación en lingüística y una pasión por las diferentes culturas, Jeremy combina su conocimiento y experiencia para proporcionar consejos prácticos, estrategias y recursos a través de su blog ampliamente reconocido. Con un tono amigable y familiar, los artículos de Jeremy tienen como objetivo capacitar a los lectores para que superen las ansiedades sociales, establezcan conexiones y dejen impresiones duraderas a través de conversaciones impactantes. Ya sea navegando en entornos profesionales, reuniones sociales o interacciones cotidianas, Jeremy cree que todos tienen el potencial para desbloquear su destreza comunicativa. A través de su atractivo estilo de escritura y consejos prácticos, Jeremy guía a sus lectores para que se conviertan en comunicadores seguros y articulados, fomentando relaciones significativas tanto en su vida personal como profesional.