22 formas sencillas de mejorar sus habilidades interpersonales en el trabajo

22 formas sencillas de mejorar sus habilidades interpersonales en el trabajo
Matthew Goodman

En la mayoría de las profesiones, las habilidades interpersonales son cruciales para el éxito. Muy pocos de nosotros trabajamos completamente solos, por lo que aprender a interactuar y comunicarse con los demás ayudará casi con toda seguridad a su carrera. Las habilidades interpersonales se conocen a veces como habilidades interpersonales, habilidades blandas o habilidades sociales. Incluyen la escucha, la resolución de conflictos y el trabajo en equipo.

En este artículo, aprenderá con precisión qué habilidades interpersonales necesita en el lugar de trabajo, cómo le beneficiarán y cómo desarrollarlas.

Cómo mejorar sus habilidades interpersonales para el trabajo

Si no tienes don de gentes, no te preocupes: con la práctica, puedes mejorar[]. Aquí tienes 22 consejos que te ayudarán a desarrollar fuertes habilidades interpersonales para el trabajo.

1. Márcate objetivos útiles

Si haces un inventario de las habilidades que ya tienes y de las que te gustaría desarrollar, podrás fijarte objetivos útiles. Mira esta lista de habilidades interpersonales y decide en cuáles te gustaría trabajar:

  • Escucha activa
  • Comunicación clara (tanto verbal como no verbal)
  • Hacer buenas preguntas
  • Empatía
  • Resolución de conflictos
  • Trabajo en equipo
  • Resolución de problemas y toma de decisiones
  • Negociar
  • Dar y recibir opiniones
  • Asertividad (un estilo de comunicación que equilibra tus necesidades con las de los demás).
  • Fiabilidad

Cuando hayas averiguado qué habilidades necesitas trabajar, empieza a buscar oportunidades para practicarlas en el trabajo.

Ver también: Cómo conocer mejor a alguien (sin ser intrusivo)

Los objetivos concretos suelen ser más útiles que los propósitos generales. Por ejemplo, si quieres mejorar tu capacidad de escucha, puedes plantearte el reto de pasar un día entero sin interrumpir a nadie. O, si tiendes a decir "sí" a todo y quieres mejorar tu capacidad de asertividad, puedes proponerte decir "no" la próxima vez que un compañero te pida que te encargues de un trabajo que no encaja en tu forma de ser.horario.

2. Busca los puntos positivos de tus compañeros

En algún momento de tu carrera, es probable que tengas que trabajar con alguien que no te guste. Pero si sabes apreciar las características positivas y la experiencia de alguien, tu actitud puede manifestarse cuando interactúes con esa persona, creando un ambiente más agradable y permitiendo una comunicación más relajada.

Por ejemplo, tu supervisor puede ser autoritario, con la molesta costumbre de decir lo mismo varias veces en cada reunión. Pero también puede ser bueno motivando a su equipo en momentos difíciles. Cuando te irrite, puedes recordarte a ti mismo que, en general, es un directivo competente que quiere que todo el mundo tenga éxito.

3. Muestra interés por tus compañeros

No hace falta que te hagas amigo de todo el mundo en el trabajo. Sin embargo, si consigues sentir curiosidad por saber cómo son tus compañeros y qué les divierte fuera del horario laboral, es probable que tus relaciones profesionales mejoren.

Desafíate a ti mismo a descubrir al menos una cosa interesante sobre cada compañero de trabajo. La curiosidad es una forma estupenda de ir más allá de las charlas triviales y conocer mejor a alguien. Si no tienes una curiosidad natural por la gente que te rodea, nuestro artículo sobre cómo interesarse por los demás puede ayudarte.

4. Centrarse en las soluciones más que en los problemas

Todos necesitamos plantear problemas de vez en cuando, pero si te quejas con demasiada frecuencia en el trabajo, darás la impresión de ser negativo. Cuando plantees un problema, intenta sugerir al mismo tiempo una solución adecuada.

Por ejemplo, en lugar de decirle a tu jefe: "No puedo concentrarme en la oficina principal los viernes por la tarde porque todo el mundo es demasiado ruidoso", podrías decirle: "Me preguntaba si podría trabajar en una de las salas de reuniones libres los viernes por la tarde... A esa hora hay mucho ruido y me cuesta concentrarme".

Si tienes la mala costumbre de quejarte todo el tiempo, quizá te gusten algunos consejos adicionales sobre cómo dejar de quejarte.

5. Ser proactivo en el mantenimiento de las relaciones laborales

Intente adoptar un enfoque proactivo a la hora de mantener sus relaciones profesionales. Al igual que las amistades, los vínculos sociales que establece en el trabajo necesitan un mantenimiento. Por ejemplo, si lleva una o dos semanas sin comer o tomar un café con sus compañeros, tome la iniciativa y proponga quedar durante el tiempo de descanso.

Puede que también te guste este artículo sobre cómo ser más sociable en el trabajo.

6. Acepta que no puedes complacer a todo el mundo

A algunas personas no les caerás bien, aunque las trates con cortesía. En la mayoría de los casos, no significa que haya nada malo en ti. Si te llevas bien con la mayoría de tus compañeros de trabajo y no tienes ningún motivo en particular para pensar que has ofendido a alguien, probablemente sea seguro asumir que vuestras personalidades simplemente no encajan.

Intenta no tomarte la descortesía como algo personal. No puedes controlar cómo se comportan los demás contigo, pero puedes enorgullecerte de ser educado y profesional cuando estás estresado. Dite a ti mismo que llevarte bien con tus compañeros es sólo una de tus obligaciones laborales.

7. Prepararse para situaciones sociales previsibles

No podemos saber con exactitud qué dirá la gente o cómo se comportará con nosotros, pero es posible prepararse mentalmente para las interacciones sociales que se producen con regularidad.

Por ejemplo, saludar a los compañeros por la mañana, entablar conversaciones triviales en la sala de descanso y escuchar atentamente a los demás en las reuniones son interacciones habituales que muchos de nosotros tenemos que afrontar en el trabajo.

No es necesario ensayar o planificar exactamente lo que quieres decir en estas situaciones, pero unos segundos de preparación pueden ayudarte a sentirte más seguro. Por ejemplo, si tiendes a quedarte paralizado cuando un compañero te pregunta: "Hola, ¿qué tal el fin de semana?", puedes dedicar unos instantes a pensar qué podrías decir en respuesta antes de ir a la oficina el lunes por la mañana.

8. Intenta ser una persona servicial

Ayudar a los demás te obliga a centrarte en algo que no seas tú mismo, lo que puede ayudarte a sentirte menos cohibido e incómodo. Cada día, ponte el reto de hacer al menos una cosa para facilitar la vida a tus compañeros. Por ejemplo, puedes ofrecerte a ordenar la sala de descanso cuando no sea tu turno u ofrecerte a encargarte de una tarea menor a un compañero abrumado.

9. Adaptarse al entorno

No tienes por qué cambiar completamente tu personalidad sólo para encajar, pero a los demás les resultará más fácil confiar en ti y te encontrarán más accesible si sigues las normas tácitas del lugar de trabajo.

Ver también: ¿Hablar demasiado? ¿Por qué y qué hacer al respecto?

Por ejemplo, si trabajas en un entorno relajado, es posible que a tus compañeros les resulte más difícil relacionarse contigo si te vistes o hablas de una manera muy formal. Si no estás seguro de qué hacer, puede serte útil seguir las indicaciones de tus compañeros. Por ejemplo, si tus compañeros a veces bromean en las reuniones o envían memes y mensajes desenfadados al canal de Slack de tu equipo, probablemente esté bien que hagas lo mismo.

10. Aprende a regular tus emociones en el trabajo

En general, hay que controlar los sentimientos cuando se está en el trabajo. De lo contrario, se corre el riesgo de socavar las relaciones y alejar a los compañeros. Por ejemplo, si uno se siente abiertamente frustrado y enfadado cuando una tarea resulta más difícil de lo esperado, puede dar la impresión de ser poco profesional o intimidatorio.

Para gestionar tus sentimientos en el trabajo, puede ser útil:

  • Conozca sus señales de alarma personales. Por ejemplo, puedes notar que tiendes a ponerte de mal humor con la gente cuando estás bajo presión para cumplir un plazo.
  • Aprenda algunos ejercicios sencillos de respiración que puede hacer en el trabajo. Puedes probar con la respiración cuadrada o simplemente inspirar profundamente por la nariz y espirar por la boca durante un par de minutos.
  • Utiliza la música para calmarte. Elabore una lista de reproducción de sonidos o música relajantes que pueda escuchar en los momentos de estrés.

11. Practicar las habilidades interpersonales fuera del trabajo

Por regla general, cuanto más practiques tus habilidades interpersonales, más fuertes se volverán. En tu día a día, busca oportunidades para interactuar con otras personas.

Por ejemplo, cuando vayas al supermercado, charla con la cajera o con tu peluquera. También puedes apuntarte a actividades que te ofrezcan muchas oportunidades de interactuar con otras personas, como las clases de improvisación. Si quieres mejorar tus dotes de oratoria, considera la posibilidad de unirte a Toastmasters.

12. Pida opiniones sobre sus habilidades interpersonales

A veces, otras personas pueden ayudarnos a averiguar en qué habilidades tenemos que trabajar. Adopte un enfoque proactivo y pida opiniones. Por ejemplo, si tiene una revisión de rendimiento próximamente, aproveche la oportunidad para preguntar a su jefe en qué tiene que trabajar. Podría decir: "Me gustaría mejorar mis habilidades con la gente. ¿Qué cree que debería mirar primero?".

También puedes pedir la opinión de un amigo de confianza, un familiar o un compañero de trabajo. También puedes grabarte a ti mismo hablando con otras personas o grabarte en vídeo cuando hagas una presentación. Pero tienes que respetar la intimidad de tus compañeros de trabajo, así que asegúrate de tener su permiso antes de grabarles.

13. Desarrollar la empatía

La empatía es la capacidad de ver una situación desde el punto de vista de otra persona. Es una habilidad valiosa que puede ayudarte a mejorar tus relaciones laborales fomentando la confianza[] Cuando estás dispuesto a tomarte el tiempo necesario para considerar un asunto desde la perspectiva de otra persona, puede que también te resulte más fácil resolver conflictos y malentendidos.

Puedes convertirte en una persona más empática:

  • Escuchar atentamente cuando alguien te cuenta sus experiencias e intentar imaginarte en su lugar.
  • Leer o ver medios de comunicación, como libros o películas, creados sobre o por personas con vidas muy diferentes a la tuya.
  • Cuando alguien dice o hace algo que te desconcierta, no asumas que es un incompetente. Desde su perspectiva, su comportamiento puede tener sentido. Dite a ti mismo: "No sé por qué actúa así, pero desde su perspectiva, probablemente piense que está haciendo lo correcto".
  • Medita: los estudios demuestran que una sola sesión de meditación de 15 minutos puede aumentar tu empatía[]. Si nunca has meditado, prueba una aplicación como SmilingMind o escucha una meditación guiada.

14. Desarrolle su sentido del humor

Compartir un chiste con tus compañeros puede hacer que un día aburrido pase un poco más rápido y mejorar vuestras relaciones laborales. Además, las investigaciones demuestran que utilizar el humor en el trabajo puede aumentar el rendimiento del equipo[] Aunque no seas ingenioso por naturaleza, puedes aprender a utilizar el humor en la conversación. Nuestra guía sobre cómo ser gracioso contiene consejos prácticos para ayudarte a apreciar el lado más alegre de la vida.

15. Aprende de tus colegas con habilidades sociales

Es probable que algunos de tus compañeros sean más hábiles que otros en el trato con la gente. Presta mucha atención a esos compañeros; quizá puedas aprender algunas lecciones.

Por ejemplo, si uno de sus compañeros tiende a hacer que todo el mundo se sienta más positivo y motivado, intente identificar los rasgos o comportamientos que animan a sus compañeros. Tal vez siempre se esfuerza por saludar a todo el mundo con una cálida sonrisa, o quizá intenta replantear los contratiempos como oportunidades de aprendizaje.

16. Muestra aprecio a tus compañeros

Busque oportunidades para decir "gracias" a sus compañeros. Mostrar agradecimiento puede hacer que tanto el que lo da como el que lo recibe se sientan bien. Si un compañero se ha desvivido por echarle una mano, puede escribirle una nota de agradecimiento o, si su lugar de trabajo cuenta con un programa de reconocimiento de empleados, proponerle para un premio.

17. Evitar transmitir chismes perjudiciales

Algunas personas utilizan los cotilleos para estrechar lazos con sus compañeros de trabajo. Pueden parecer inofensivos, pero los cotilleos pueden socavar las relaciones laborales y dificultar la confianza entre las personas en el trabajo.[] Como norma general, si no dirías algo a alguien a la cara, no lo digas a sus espaldas.

18. Presta atención a tu lenguaje corporal

El lenguaje corporal es una habilidad social porque tiene un gran efecto en cómo te perciben los demás. Las investigaciones han demostrado que tendemos a juzgar a otras personas en función de su comunicación no verbal,[] así que intenta pensar en el tipo de impresión que causas.

Para dar la impresión de ser una persona afable pero profesional, recuerde lo siguiente:

  • Mantenga el contacto visual cuando hable con alguien, pero procure no mirarle fijamente.
  • Siéntate o ponte de pie con una postura erguida (pero no rígida).
  • Relaja los músculos de la mandíbula y la cara.
  • Mira al frente. Inclinar la barbilla hacia arriba puede hacerte parecer superior o arrogante, e inclinar la cabeza hacia abajo puede hacerte parecer sumiso o falto de confianza.

Lee nuestra guía sobre el lenguaje corporal de confianza para obtener más ideas.

19. Aprender a aceptar las críticas constructivas

Es normal recibir críticas constructivas en el trabajo, por ejemplo, como parte de una revisión del rendimiento. La forma en que respondes a las críticas puede dejar una impresión duradera. Si las aceptas con calma y elegancia, es probable que tus compañeros y tu jefe te consideren profesional, socialmente hábil y responsable.

He aquí algunos consejos que pueden ayudarte a aceptar las críticas:

  • Da las gracias: a menos que el comentario sea claramente destructivo o malintencionado, agradece a la otra persona lo que ha pensado.
  • Evita ponerte a la defensiva y pregúntate: "¿Qué puedo aprender de esto?" Recuerda que tu supervisor debe darte su opinión sobre tu trabajo, no juzgarte como persona.
  • Pide aclaraciones si no has entendido lo que te han dicho.
  • Pregunte cómo puede mejorar; esto demuestra que está dispuesto a tener en cuenta los comentarios.
  • Pida formación adicional si la necesita: su jefe probablemente quedará impresionado si toma la iniciativa, y solicitar ayuda adicional demuestra autoconocimiento.

20. Aprender a disculparse eficazmente

Casi todo el mundo comete errores en el trabajo. Afortunadamente, en la mayoría de los casos, una disculpa sincera puede ayudar a salvar o reparar una relación profesional[].

He aquí cómo disculparse:

  • Reconoce lo que has hecho.
  • Reconoce cómo tus acciones afectaron a la otra persona.
  • Explica qué harás de forma diferente en el futuro para no volver a cometer el mismo error.
  • Evita poner excusas o culpar a otra persona de tu error.

Por ejemplo, podrías decir: "Jan, siento no haber preparado el nuevo material de formación a tiempo para el seminario de formación. Sé que mi error te causó mucho estrés porque tuviste que preparar el nuevo material en el último minuto. Sé que tengo que trabajar en mi gestión del tiempo, así que estoy probando una nueva aplicación de gestión del tiempo para ayudarme a priorizar mis tareas".

21. Practicar la comunicación asertiva

La comunicación asertiva consiste en dejar claras tus necesidades respetando al mismo tiempo los derechos y límites de los demás. La asertividad puede mejorar la calidad de tus relaciones y ayudarte a resolver conflictos,[] por lo que puede ayudarte a llevarte bien con la gente en el trabajo.

He aquí algunas formas de ser más asertivo:

  • Deja claras tus necesidades y límites. Por ejemplo, puedes decir: "Me encantaría hacer horas extra de vez en cuando, pero necesito que me avises con unos días de antelación porque tengo que organizar el cuidado de los niños".
  • Utiliza frases con "yo" para reafirmarte sin poner a la otra persona a la defensiva. Por ejemplo, "Tengo la sensación de que me pides que me encargue de demasiado trabajo" es mejor que "Siempre me das demasiado trabajo".
  • Habla con un tono de voz seguro. Evita murmurar o utilizar muchas palabras de relleno como "um" o "er".
  • Pelea limpio. No recurras a insultos, menosprecios ni a sacar a relucir el pasado cuando intentes resolver un conflicto, sino que trata de encontrar una solución beneficiosa para todos.

Para más consejos, consulta nuestra guía sobre cómo ser más asertivo.

22. Practicar la escucha activa

La escucha activa puede mejorar notablemente sus relaciones profesionales, ya que le ayuda a establecer una buena relación con compañeros de trabajo y clientes, a resolver conflictos y a entender exactamente lo que los demás necesitan de usted[].

He aquí algunas formas de escuchar mejor y parecer más comprometido:

  • Nunca interrumpas a nadie a menos que sea una emergencia.
  • Reduzca al mínimo las distracciones. Guarde el teléfono y no intente trabajar en algo y mantener una conversación al mismo tiempo.
  • Cuando otra persona esté hablando, no ensayes tu respuesta, sino que espera a que termine y decide cómo quieres responder.
  • Utiliza frases cortas y sonidos alentadores como "Sigue" y "Mm-hm" para indicarles que está bien que sigan hablando.

Tenemos una guía detallada sobre cómo ser mejor oyente que te ayudará a desarrollar esta habilidad.

¿Por qué es importante tener buenas habilidades interpersonales en el trabajo?

Unas buenas habilidades interpersonales pueden hacerte más feliz y más eficaz en el trabajo. Éstos son algunos de sus beneficios:

  • Mayor satisfacción laboral: Si tienes buenas dotes interpersonales, probablemente te resulte más fácil hacer amigos en el trabajo, lo que puede hacer que tu trabajo sea más agradable y satisfactorio.
  • Mejores redes profesionales: Si tienes una red profesional sólida, puede que te resulte más fácil conseguir un nuevo trabajo en tu sector cuando llegue el momento de dejar tu puesto actual.
  • Mayores posibilidades de ascenso a puestos superiores: Las habilidades interpersonales son clave para un liderazgo eficaz,[] así que si quieres ascender a un puesto directivo, demostrar grandes habilidades interpersonales puede ayudarte.
  • Acceso al apoyo social: Todo el mundo tiene días difíciles en el trabajo, pero si tienes relaciones positivas con tus compañeros, es posible que puedas pedirles apoyo.



Matthew Goodman
Matthew Goodman
Jeremy Cruz es un entusiasta de la comunicación y un experto en idiomas dedicado a ayudar a las personas a desarrollar sus habilidades de conversación y aumentar su confianza para comunicarse de manera efectiva con cualquier persona. Con formación en lingüística y una pasión por las diferentes culturas, Jeremy combina su conocimiento y experiencia para proporcionar consejos prácticos, estrategias y recursos a través de su blog ampliamente reconocido. Con un tono amigable y familiar, los artículos de Jeremy tienen como objetivo capacitar a los lectores para que superen las ansiedades sociales, establezcan conexiones y dejen impresiones duraderas a través de conversaciones impactantes. Ya sea navegando en entornos profesionales, reuniones sociales o interacciones cotidianas, Jeremy cree que todos tienen el potencial para desbloquear su destreza comunicativa. A través de su atractivo estilo de escritura y consejos prácticos, Jeremy guía a sus lectores para que se conviertan en comunicadores seguros y articulados, fomentando relaciones significativas tanto en su vida personal como profesional.