Cómo cambiar de tema en una conversación (con ejemplos)

Cómo cambiar de tema en una conversación (con ejemplos)
Matthew Goodman

¿Alguna vez te has encontrado en medio de una conversación con alguien y de repente te has sentido muy incómodo?

Quizás estabas hablando con alguien y te hizo una pregunta un poco demasiado personal. No querías contestar y no sabías qué decir para cambiar de tema. No estabas seguro de si hacerlo te haría parecer maleducado.

Probablemente a ti también te suene: estás hablando con alguien nuevo -o peor aún, con tu enamorado- y la conversación se agota por completo. El silencio te hace sentir muy incómodo y desearías saber cómo cambiar rápidamente de tema y hacer que la conversación fluya.

¿Y alguna vez has tenido una conversación con alguien que no para de hablar? Puede estar hablando de un tema que no te interesa o del que no sabes nada. Acabas sentado sin hacer nada, intentando desesperadamente encontrar una forma de reconducir la conversación y hablar de un tema que te resulte cercano.

Si alguna de estas situaciones le resulta familiar, siga leyendo: vamos a compartir con usted 9 formas de cambiar el tema de una conversación incómoda.

En primer lugar, te daremos 7 consejos para pasar de un tema a otro de una forma más educada y sutil, y después te daremos 2 consejos para cambiar de tema de una forma más brusca y directa ¡para esos casos súper tozudos!

Ver también: Cómo ser más amable (con ejemplos prácticos)

Cambiar sutilmente de tema en una conversación

Si quieres reconducir una conversación con suavidad y elegancia, es importante ser sutil a la hora de cambiar de tema.

Cuando se es sutil a la hora de cambiar de tema en una conversación, no hay que preocuparse por parecer maleducado porque el cambio no será drástico ni obvio. Aquí tienes 7 consejos sobre cómo sutilmente cambiar de tema en una conversación:

1. Utilizar la asociación para pasar a un tema relacionado

Si alguien está hablando de un tema que te incomoda, que no te interesa tanto o del que no sabes mucho, puedes cambiar de tema mediante la asociación.

La asociación se produce de forma natural cuando una conversación fluye de un tema a otro, pero si quieres hacerlo de forma intencionada, tienes que escuchar atentamente lo que dice la otra persona. Si escuchas con atención, podrás identificar alguna parte de la conversación que puedas utilizar para desviarte hacia otro tema.

Ver también: 12 Tipos de Amigos (Falsos & Fairweather vs Forever Friends)

He aquí un ejemplo de cómo utilizar la asociación:

Supongamos que tu padre te está hablando del coche nuevo de su amigo y a ti no te interesan mucho los coches. Podrías utilizar la asociación y preguntarle a tu padre cómo le va a su amigo. Tú y tu padre estabais hablando específicamente del coche de su amigo, pero como él mencionó a su amigo, tú pudiste asociar esa parte de la conversación y cambiar el tema para hablar más...específicamente sobre su amigo.

2. Responder a una pregunta incómoda con una pregunta

A veces ocurre que la gente es demasiado curiosa para su propio bien. Puede que tengan buenas intenciones al hacer preguntas personales, pero a veces sobrepasan los límites y sus preguntas pueden desencadenar una discusión.

La forma de cambiar de tema en una conversación en la que te hacen preguntas muy delicadas, es darle la vuelta a las cosas y devolverle la pregunta a la otra persona. Esta estrategia te ayuda no sólo a evadir la pregunta, sino también a desviar la conversación en otra dirección y ahorrarte una discusión.

Por ejemplo, la próxima vez que la tía Caroline te diga: "¿Y ahora cuándo vais a dejar de viajar Sam y tú? ¿No crees que ya es hora de que os establezcáis?", podrías decirle: "Oye, tía Carole, ¿no prometiste que vendrías a visitarnos a Europa? Todavía estamos esperando eso".

3. Revisar un tema anterior

Cuando la conversación se agote, o ya no sepas qué decir, puedes intentar sacar a colación algo de lo que estabais hablando antes.

Si se te ocurre una pregunta relevante que hacer a alguien sobre una conversación anterior y que no hiciste en su momento, es una forma fácil de mantener la conversación cuando ha perdido fluidez, o incluso puede ser una forma de interrumpirla y cambiar de tema.

Por ejemplo, digamos que en una conversación anterior se había hablado de la situación laboral de alguien, concretamente de cómo le habían ido las cosas en su trabajo. Se podría utilizar una frase de transición para volver a este tema y decir algo como " Antes de que se me olvide Mi hermano pequeño está estudiando marketing y me gustaría que alguien del sector le diera algunos consejos".

Si estuvieras utilizando esta estrategia para cambiar de tema, podrías empezar así: "Oye, perdona que cambie de tema, pero se me acaba de ocurrir algo que quería preguntarte antes, pero se me ha olvidado..." y luego continuar como en el ejemplo anterior.

4. Crear una distracción

Crear una distracción te permite dirigir hábilmente la conversación en otra dirección. El interlocutor ni siquiera tendrá ocasión de darse cuenta de que has cambiado de tema.

Hay dos formas de crear distracción. Puedes hacer un cumplido a alguien o abandonar físicamente la conversación.

Digamos que tu amiga ha estado hablando sin parar de sus hijos, podrías hacerle un cumplido y decirle: "Eres tan buena madre, Ben y Sarah tienen tanta suerte de tenerte". Luego puedes cambiar rápidamente de tema haciéndole una pregunta, como: "Oye, las vacaciones de Semana Santa se acercan pronto, ¿qué planes tienes?".

Puedes hacer un cumplido sobre algo tangible, como lo que lleva puesto la otra persona, su aspecto o un accesorio que lleve consigo. De nuevo, lo que quieres es hacer un cumplido y luego añadir una pregunta o un comentario para cambiar de tema. He aquí un ejemplo: "¿Es una funda nueva para el móvil lo que veo? Me encanta! Yo también necesito una nueva, ¿dónde la has comprado?".

5. Elimínate (físicamente)

Otro consejo que funciona cuando cambiar de tema ha fracasado es abandonar físicamente la conversación.

Basta con que te excuses para ir al baño o para pedir algo de beber si estás fuera. Para cuando vuelvas, la otra persona probablemente habrá olvidado de qué estabais hablando o se habrá distraído con otra cosa.

Incluso puedes hacer un comentario sobre los baños, o sobre el bar cuando vuelvas para añadir otra distracción. Por ejemplo, puedes decir: "¡Los baños de aquí están muy limpios, y tenían esa música tranquilizadora sonando de fondo! Raro, ¡pero muy guay!".

6. Utilizar las señales del entorno inmediato

Si la conversación se ha agotado y no sabes de qué hablar a continuación, o si simplemente quieres cambiar de tema, prueba a sintonizar con lo que te rodea. Hacer comentarios sobre lo que ves puede dar pie a una conversación totalmente nueva.

Si estás dando un paseo con un amigo y os habéis puesto al día de todo lo que ha pasado en la vida de cada uno la semana pasada y la conversación se apaga, mira a tu alrededor ¿Qué ves?

Señala o comenta algo que veas. Quizá veas algún edificio muy viejo y destartalado en el que nunca te habías fijado antes, podrías decir algo como: "Oye, ¿te habías fijado antes en ese edificio viejo y destartalado? Parece un poco encantado, ¿no crees?".

Ahora has iniciado una conversación totalmente nueva sobre un tema novedoso acerca de los edificios encantados.

7. Reconocer, aportar y redirigir

Este consejo funciona mejor si la persona con la que mantienes una conversación está hablando "hacia" ti, es decir, si es ella la que habla y tú no puedes decir ni una palabra.

A veces, las personas que tienden a hablar mucho sienten que necesitan explicarse explícitamente para que los demás les entiendan bien. Por eso, lo que puede funcionar en estas situaciones es reconocer lo que han dicho y resumirlo con tus propias palabras para demostrar que les has entendido, luego añadir tus propias ideas y reconducir la conversación a partir de ahí.

Por ejemplo, supongamos que tu amiga ha empezado a hablarte del yoga, de lo maravilloso que es y de que todo el mundo debería probarlo. Lleva horas repitiendo las ventajas del yoga y repitiendo lo mismo de distintas maneras.

Esto es lo que hay que hacer: Primero, interrúmpela educadamente diciendo: "Espera, ¿así que lo que estás diciendo es que los beneficios del yoga superan con creces los de cualquier otro tipo de entrenamiento físico?" A continuación, da inmediatamente tu opinión. Podrías decir algo como: "Bueno, yo creo que el entrenamiento de resistencia es mejor, además, aunque aprecio los beneficios del yoga, prefiero con mucho el levantamiento de pesas" A continuación, si quieres redirigirlala conversación, puedes hacer una pregunta sobre algo relacionado, como: "¿Qué otra clase de ejercicio tomarías, si no es yoga?".

Cambiar bruscamente de tema en una conversación

Si has intentado cambiar de tema de manera informal, pero no ha funcionado, entonces puede que tengas que optar por un enfoque más drástico.

Para poner fin rápidamente a una conversación que te hace sentir incómodo o incómoda, intenta ser más brusco en la forma de reconducir la conversación.

Aquí tienes 2 consejos para cambiar bruscamente de tema en una conversación:

1. Establecer límites

Si te encuentras en una situación en la que la otra persona se niega a que cambies de tema, prueba a poner un límite. Esto le hará saber rápida y eficazmente cuál es tu postura y permitirá que la conversación avance en otra dirección.

El establecimiento de un límite consta de tres partes:

  1. Identificar el límite.
  2. Di lo que necesites.
  3. Explica las consecuencias de cruzar el límite para la otra persona.

Este es un ejemplo de cómo establecer un límite si un familiar te presiona para que le des detalles sobre cuándo vas a sentar la cabeza:

  1. No estoy dispuesto a discutir este tema contigo.
  2. Me gustaría hablar de otras cosas emocionantes que están ocurriendo en mi vida, como el trabajo y mis viajes.
  3. Si sigues presionándome para que te responda cuándo voy a sentar la cabeza, terminaré la conversación en ese mismo momento y hablaré con otra persona.

2. Sé atrevido y obvio

Algunas conversaciones requieren que seas más directo a la hora de cambiar de tema, por ejemplo, cuando se ha producido un largo silencio o cuando alguien ha dicho algo especialmente grosero.

Si estás conversando con alguien y se produce un largo silencio, puedes sentirte incómodo. Pero los silencios son normales en las conversaciones, ni siquiera los notamos cuando hablamos con gente que conocemos bien. Cuando estamos con gente nueva o en una cita, resultan más incómodos porque tendemos a presionarnos más en esos casos.

Una forma de romper la incomodidad es con un comentario atrevido y divertido, seguido de una pregunta. Podrías decir: "¿No te encantan los silencios largos?" Esto podría hacerles reír y crear un nivel de comodidad porque estás llamando la atención sobre el hecho de que ambos probablemente os sentís un poco incómodos, pero estás siendo desenfadado al respecto. Luego podrías introducir un tema del que no habéis habladoantes, por ejemplo: "Oye, no hemos hablado antes de deportes, ¿qué deportes te gustan?".

También puedes utilizar frases atrevidas y directas para cambiar la conversación cuando alguien acaba de hacer un comentario grosero.

Podrías utilizar estas frases para señalar tu enfado y tu intención de cambiar de tema de forma obvia: "Vale, entonces..." "Pasemos rápidamente a otro tema..." "Bien, de todos modos...".

Preguntas frecuentes

¿Es de mala educación cambiar de tema en una conversación?

Las conversaciones típicas evolucionan y los temas cambian de forma natural a medida que avanza la conversación, por lo que no es descortés si rediriges la conversación un poco antes. Siempre que escuches a la otra persona y reconozcas lo que tiene que decir antes de cambiar de tema, no es descortés cambiar de tema.

¿Cómo arreglo una conversación de texto seca?

Para que la conversación fluya a través del texto, trátala como si fuera una conversación en la vida real. Haz preguntas a la otra persona y amplía tus propias respuestas para que la otra persona también pueda hacerte preguntas de seguimiento.

¿Cómo dirijo la conversación para invitar a alguien a salir por SMS?

Piensa en una idea para una cita, por ejemplo, el cine. Luego, hazle a la otra persona una pregunta relacionada con esto. Podrías decir algo como: "Oye, acabo de ver el tráiler de la nueva película de Spiderman, ¡parece muy chula! ¿Te gustan las películas de superhéroes?".

Dependiendo de cómo responda la otra persona, puedes utilizar esto como una forma de invitarla a salir. Si te ha dicho que le encantan las películas de superhéroes, pídele que vaya a ver la película contigo. Si te ha dicho que odia las películas de superhéroes, pregúntale qué género de películas le gusta y averigua si hay alguna película en cartelera de ese género que puedas invitarle a ver contigo.

¿Cómo cambio de tema cuando alguien empieza a cotillear?

En primer lugar, pregúntale a tu amigo por qué te está contando esa información. Esto le pondrá en un aprieto y le hará reflexionar sobre lo que está haciendo. A continuación, puedes establecer un límite con tu amigo. Hazle saber que no quieres formar parte de ningún cotilleo.




Matthew Goodman
Matthew Goodman
Jeremy Cruz es un entusiasta de la comunicación y un experto en idiomas dedicado a ayudar a las personas a desarrollar sus habilidades de conversación y aumentar su confianza para comunicarse de manera efectiva con cualquier persona. Con formación en lingüística y una pasión por las diferentes culturas, Jeremy combina su conocimiento y experiencia para proporcionar consejos prácticos, estrategias y recursos a través de su blog ampliamente reconocido. Con un tono amigable y familiar, los artículos de Jeremy tienen como objetivo capacitar a los lectores para que superen las ansiedades sociales, establezcan conexiones y dejen impresiones duraderas a través de conversaciones impactantes. Ya sea navegando en entornos profesionales, reuniones sociales o interacciones cotidianas, Jeremy cree que todos tienen el potencial para desbloquear su destreza comunicativa. A través de su atractivo estilo de escritura y consejos prácticos, Jeremy guía a sus lectores para que se conviertan en comunicadores seguros y articulados, fomentando relaciones significativas tanto en su vida personal como profesional.